El 28 de diciembre se celebra el Día de los Santos Inocentes en muchos países del mundo, una fecha en la que las personas suelen realizar bromas y chistes. La tradición tiene un origen pagano-religioso ligado a la conmemoración de los infantes asesinados en Belén por orden del rey Herodes, según el relato del Nuevo Testamento, específicamente en el libro de San Mateo.
La historia cuenta que unos sabios, conocidos como los Reyes Magos, llegaron a Jerusalén buscando al futuro rey de los judíos recién nacido. Al informar al rey Herodes sobre su búsqueda, este, sintiéndose amenazado, ordenó la matanza de todos los niños menores de dos años en Belén. Por tanto, la Iglesia católica conmemora este día en honor a esos niños inocentes.
En la actualidad, el Día de los Inocentes se ha expandido en todo el mundo, y las personas suelen participar en diversas actividades para celebrar la fecha. Entre las tradiciones asociadas se encuentran disfraces, danzas tradicionales y, especialmente, bromas. Durante este día, es común que las personas jueguen bromas a familiares, amigos y compañeros de trabajo, tratando de sorprenderlos de manera ingeniosa y humorística.
Es importante destacar que las bromas realizadas en el Día de los Inocentes deben ser inofensivas y hechas en un tono de diversión, evitando causar daño o molestias significativas a los demás. La creatividad y el buen humor son elementos fundamentales en esta festividad.